lunes, 21 de mayo de 2012

Tenía un corazón tan grande que asustaba


Tenía un corazón tan grande que asustaba. Asustaba herirlo e incluso se asustaba de sí mismo, así que todo lo que le rodeaba estaba lleno de intensidad, para lo bueno y para lo malo.

En una ocasión contaba que una vez una amiga suya le decía que aunque al principio parecía borde y seca cuando se llegaba a conocerla se hacía inolvidable. Lo decía medio pidiendo disculpas medio avisándote de lo que podía pasar si te quedabas tan solo a las puertas.

Y era verdad que tocaba tu Alma. Y no con las cosas que eran más evidentes, con su espontáneidad, su energía, su simpatía o su belleza, sino con algo que era completamente intangible pero que no tenía precio. Tan carente estaba de precio que era imposible comprarlo, ni agarrarlo, ni poseerlo. Tan sólo cabía admirarlo, desde cerca si eras lo suficientemente listo como para sentirlo detrás de su coraza, desde lejos si su feroz armadura acababa por asustarte.

Y es que hay cosas que sólo son para corazones valientes, hay tesoros que solo pueden ser abiertos cuando superas tus miedos y estás dispuesto a enfrentarte a aquello que se sale, y de que manera, de tu zona de confort. Hay tesoros que son un regalo para quien los merece y Federico no podía dejar de pensar que él no lo había merecido, que él había aprovechado las excusas que por doquier ella le ofrecía en bandeja para justificar el apagar aquello que le quemaba. Por primera vez en su vida hubiese deseado ser traidor a sus palabras, a sus principios, a sus teorías, pero era demasiado tarde y la vida no suele esperarte. Cuando te paras te pasa por encima, dejándote el aroma mezclado de lo que desgarra tu piel y lo que la sana, dejándote el sabor del aprendizaje, a veces dulce, a veces amargo.

Habían pasado ya suficientes días, experiencias y eventos como para que su recuerdo hubiese pasado a un segundo plano pero parecía que con el tiempo no sólo no se deshacía sino que iba aumentando la intensidad de su ausencia. Y en mitad de su anhelo no pudo más que esbozar una sonrisa, complice porque ahora en la distancia entendía mejor su esencia, sincera porque en este día señalado sentía de corazón que la quería allí donde estuviera, agradecido sabedor de que la consciencia y el recorrido que se le abría delante hubiese sido difícil sin su presencia en escena.

Así que siguió caminando disfrutando del irreal placer que le brindaban sus memorias, recordando que hay personas tan especiales que cuando les haces un regalo de cumpleaños el que acaba disfrutándolo eres tú incluso en su ausencia, mandando un mensaje al Universo que, de nuevo, era más para si mismo que para ella y en el que levantando su copa decía: “Muchísimas felicidades y que tengas una segunda mitad de década fantástica. Allí donde estés, espero que estés muy bien y sigas llenando de magía lo que tocas. Tenías razón, quien te conoce no te olvida”.

13 comentarios:

Marta dijo...

Avatar, cómo me ha gustado!:-) Casi todas tus aportaciones, suceden en el momento oportuno..... MIL GRACIAS :-)
El titulo es..... Impactante.... Precioso!
Por fin ha aparecido Federico ;-) Cómo te comprendo a ti, TAMBIEN.
En ocasiones, la VIDA nos regala personas maravillosas.... Diamantes....
Erich Fromm, en "El arte de amar", escribe: ".... En el amor fraternal...... Las diferencias en talento, inteligencia, conocimiento, son despreciables en comparacion con la identidad de la esencia humana común a todos los homres. Para experimentar dicha identidad es necesario penetrar desde la periferia hasta el núcleo. Si percibo en otra persona nada más que lo superficial, percibo principalmente las diferencias, lo que nos separa. Si penetro hasta el núcleo, percibo nuestra identidad, el hecho de nuestra hermandad. Esta relacion de centro a centro es una .... el amor fraternal es el amor entre iguales"......
Gracias Avatar por éste regalo tan especial para mi....en un día como hoy :-)

Marta dijo...

Este post me ha evocado ésta overtura del "Festival académico" de Brahms que comparto con vosotros.....Os invito a vibrar con ella:
http://www.youtube.com/watch?v=yb6qkZY6TLU&feature=youtube_gdata_player

Anónimo dijo...

Gracias Avatar...necesitaba escuchar a un Federico!!! Hoy me siento menos pava al leer esta historia tan verdadera y tan llena de amor incondicional...Nada mejor para avanzar que brindar por un amor ausente que se ha sentido tan profundamente...FEDERICOS DEL MUNDO...Os quiero!!!

Anónimo dijo...

Aunque tú no lo sepas.

El 19 de su madre (referente pesado) menos 6, empezaba su década de números pares, redondos, secos y confusos. En ese mayo de personas especiales, de Tauros racionales y Géminis cambiantes, volvieron a encontrarse.
La madrugada de su día, en los Condes de San Isidro 22, tan de Málaga, tan de Madrid, los dos estaban en el mismo sitio. Él no lo sabía.
Primero entró su amigo, distinto, dominante, casi superficial, jugando en su terreno de tierra batida.
Y después, el vínculo y el destino nuevo. Ella se acercó para tocarle, por fin, en esa oportunidad presente. No tuvo tiempo. Él marchó apenas unos segundos después de haber llegado. Quizá no era el momento, pensó. Entonces, Ella pudo decírselo en privado y en directo, para sí misma también y el día de su cumpleaños: Muchas felicidades, espero que la nueva década te convierta en un mago blanco.

Anónimo dijo...

"Amar es alegrarse por la mera existencia del ser amado" Es una definición bella y, a veces, dolorosa de tan incondicional. Eso de alzar la vista al Universo, con tan sólo el agradecimiento por haber sentido y con sólo el buen deseo del bienestar de la otra persona, puede parecer poco, puede parecer incluso un ritual mágico típico de niños, pero quien puede llegar a amar de esta manera, acaba desarrollando su propia capacidad de amar, acaba por abrir su corazón a golpe de generosidad sin llegar a endurecerlo, y eso, en los tiempos que corren, es uno de los más preciados aprendizajes. Quizás más importante que amar a alguien en concreto es aprender a amar.

Anónimo dijo...

Marta: si es tu cumpleaños: felicidades!!!

Me uno a Anomino 1: FEDERICOS DEL MUNDO: yo tambien os quiero!! jeje, pero a ver si aprendeis a ser más valientes para estar a la altura de las FEDERICAS DEL MUNDO!

Anomino 2: tu comentario es mágico, enigmático. Cuenta un poco más sobre lo que quieres decir porque suena muy bonito.

Anomnino 3: ¿quien se ha atrevido a definir Amor? Yo creo que lo que hay que aprender es a amarse a si mismo, porque el amor hacia los demás, no se aprende: se SIENTE misteriosamente... y si eres valiente, lo enfrentas y si eres cobarde te vas. Así de sencillo, lo que pasa es que lo complicamos mucho.

Antonio ahora vendrá a decirnos que para Amar a los demás hay que amarse a uno mismo primero;-) Le contesto: son caminos que pueden vivirse al mismo tiempo:-))

En este post hay una elección de no enamorarse.

Y tú, ¿qué eliges? ENAMORARSE O NO.


Cuando uno se enamora las cuadrillas
del tiempo hacen escala en el olvido,
la desdicha se llena de milagros
el miedo se convierte en osadía
y la muerte no sale de su cueva.
Enamorarse es un presagio gratis
una ventana abierta al árbol nuevo
una proeza de los sentimientos
una bonanza casi insoportable
y un ejercicio contra el infortunio.
Por el contrario desenamorarse
es ver el cuerpo como es y no
como la otra mirada lo inventaba,
es regresar más pobre al viejo enigma
y dar con la tristeza en el espejo.
Mario Benedetti.

ESA dijo...

MAGNÍFICA ENTRADA ANTONIO, MAGNÍFICAS LAS APORTACIONES DE TODOS!!!!

Me llena de alegría leer a tantos "CORAZONES TAN GRANDES"!!!!

La persona cumpleañera de la que habla el post, Federico, Marta, anónimo 1, anónimo 2, anónimo 3, anónimo 4 y, por supuesto, Antonio, a alguno/a os conozco y a otros no, las palabras de todos vosotros (así como los dos personajes del post) emanan AMOR.

Y este AMOR, esta demostración de que hay tantos GRANDES CORAZONES, me ha dado un extra de energía.

Un brindis por todos los CORAZONES GRANDES!!!!

Anónimo dijo...

Me parece que el anónimo 3 y el 4 no están muy de acuerdo (yo soy el 3) Gracias de antemano por tus reflexiones, que a su vez me hacen pensar a mí también ;)

"¿quien se ha atrevido a definir Amor?" ... Cualquiera.
¿Por qué no?

No se trata de tener una fórmula exacta, es sólo una forma de expresar un sentimiento, y ojalá todo el mundo se atreviera a tener su propia definición,así nos enriqueceríamos y serviría para poner a prueba nuestra capacidad de tolerancia hacia lo que otros piensan.

En cuanto a si el amor hacia los demás no se aprende...estamos de acuerdo en que es algo que se siente... ¿misteriosamente? (a veces no de forma tan misteriosa. Si hiciéramos un perfil de todas las personas con las que hemos mantenido una relación nos sorprenderíamos de todos esos elementos insconcientes que nos han llevado a elegir más o menos el mismo tipo de persona, aunque a priori parezcan diferentes, y eso no es un misterio (a lo mejor para uno mismo sí), pero tiene que ver con un chorro de condicionamientos de todo tipo: bioquímicos, psicológicos, afectivos, de lo que también hemos aprendido de la relación o "no-relación" de nuestros progenitores, etc, etc... Por todo esto y mucho más, pienso que no es que compliquemos las cosas mucho, es que en cuestión de naturaleza humana no todo se puede medir sólo en función de ser valientes o no. A veces "irse" o dejar partir al otro no es precisamente la decisión más cobarde. Se requiere mucho valor y fortaleza interna para decidir no continuar a pesar incluso de tus propios sentimientos, porque si algo no fluye, ya de por sí es una señal, y saber no aferrarse a los sentimientos y a las personas es también todo un aprendizaje de valientes. Aprender a soltar es signo de madurez.

Quizás en el post puede haber una elección, aunque yo no la he entendido como una elección de no enamorarse, sino como una elección de no luchar por algo que se debería de dar de forma natural. Aunque esta es sólo mi interpretación del texto, sólo el autor sabe realmente lo que quiso decir en el post.

Y ya por último, sí, anónimo 3, yo también creo que Antonio diría que para amar a los demás hay que amarse a uno mismo primero. No es incompatible amarse a uno mismo y amar a otros, pero para mí sí que es imposible amar a los demás si no has aprendido primero a quererte a ti mismo, en ese orden.

Un saludo a tod@s y gracias

Anónimo dijo...

Yo creo que por escrito somos todos muy valientes y muy maduros y reflexivos. La realidad es lo que asusta, tanto para expresar lo que sientes como para guardar el debido silencio o hacerlo en el momento oportuno. ¿Cuándo sabes que estás soltando porque la situación no fluye y no por tu miedo a enfrentarla?

Miedo, Osadía...difícil balanza.
Como la vida misma...

PRESIDENTA DE LA ASOCIACIÓN FEDERICOS SIN FRONTERAS

Anónimo dijo...

La naturaleza humana es maravillosamente indefinida y complicada.

Sigue justificando con "no luchar por algo que se debería de dar de forma natural", y sigue confundiendo orgullo con fortaleza.

Despues reafirmate en las teorias puristas y alejadas de nuestra condición humana de conflictos por resolver.
Benditas dudas e inseguridades, benditos sentimientos (que palabra tan bonita y que perversión del lenguaje ponerle un guion para separarla). Bendito poema de Benedetti.

Estoy de acuerdo con que todos somos grandes corazones. Tambien estoy de acuerdo con que es más facil decir las cosas por escrito.
Y de acuerdo con el autor del post que escribe para él mismo (como no...).

Me queda mucho por aprender.

Muchas gracias a todos: al autor, y a los que comentan, porque hago terapia leyendo y me relaja en los días dificiles.

Como considero que hago un comentario critico, asumo la autoria. Noelia.

Marta dijo...

So many presents!:-D Bless you ALL.... Thanks you :-)

Anónimo dijo...

Al habla anónimo 4! alias Nakrama. Por cuestiones de mi blog, no podía utilizar mi cuenta Google, por eso estaba yo tan contenta con mi anonimato, pero la gente se está poniendo un pelín seria por aquí, así que yo doy mi alias y hasta el nombre de mi blog: luces y sombras y no pongo foto porque estoy recién levantada, jejeje (es sólo por ponerle un poco de guasa)

Me gusta mucho la reflexión de la presidenta de la asociación de Federicos sin fronteras, jeje... Me ha hecho pensar y es muy interesante y elegante tu comentario. Tu pregunta da en el clavo ¿cómo saber si es miedo o si se está soltando? Quizás sea algo tan, tan personal, que tan sólo el que hace la elección pueda saberlo en lo más profundo de su ser. En más de una ocasión me he visto en ese terreno, y aún decidiendo una cosa u otra, unos lo ven como un acto de fortaleza, otros lo entienden al revés, porque al final cada uno interpreta las cosas como quiere o como puede. Así que sólo puedo hablar desde mí, desde mi más humilde opinión, y por supuesto que escribiendo es más fácil, y que la realidad es otra cosa, por eso ya decía antes que mejor no resumirlo todo a una cuestión de osadía o cobardía, que el ser humano, nos guste o no, es más complejo, y en cuestión de sentimientos todos somos vulnerables. Por eso creo que es importante conocerse y quererse a uno mismo, porque es la única forma de mantenernos en nuestro centro y cuando alguien nos confronte no ponernos a la defensiva y reaccionar atacando, simplemente aceptar que otros piensan diferente y que eso no amenaza nuestra identidad. Esto en frío es muy fácil. Quízás lleve toda una vida este aprendizaje. Yo no lo sé. Un abrazo para todos los corazones.

Anónimo dijo...

PRECIOSO Y CON MUCHÍSIMO SENTIMIENTO Y AMOR, GRACIAS .